Conflicto Israel - Palestina en el cine publicado hace 10 Años
El cine es un buen vehículo para transmitir ideas, denuncias y esperanzas, y eso es lo que nos transmite el cine sobre el conflicto entre Israel y Palestina. A través de estas películas podemos desgranar un poco la realidad de dos sociedades enfrentadas, a menudo con un mensaje conciliador, nos cuentan historias que nos resultan muy lejanas y muy cercanas a la vez. Este es un conflicto que nos ha acompañado toda la vida, hemos visto por televisión como se suceden las crisis, los intentos de negociación y las escaladas militares, como la que nos ha encogido el corazón este verano. Desde Versió Postal os proponemos un recorrido por el cine que trata este tema.
Estas películas pueden ser producciones de la zona, pero también nos encontramos con películas de otras nacionalidades como la italiana Domicilio privado (Saverio Costanzo, 2004) que nos propone una reflexión sobre la resistencia pacífica en el territorio, o la canadiense Inch'Allah (Anaïs Barbeau-Lavalette, 2012) que nos muestra las dificultades para salir adelante con que se encuentra la población palestina. También queremos citar la francesa Una botella en el mar de Gaza (Thierry Binisti, 2012) que nos presenta la voluntad de romper con el odio entre las dos comunidades de una joven judía y un chico palestino que vive en la Franja de Gaza.
Los títulos que nos llegan de Palestina son pocos, pero podemos hablar de grandes películas como Paradise now (Hany Abu-Assad, 2005), que nos narra las últimas horas de unos jóvenes palestinos a punto de cometer un atentado suicida, o La sal de este mar (Milh Hadha al-Bahr, 2008), una road movie que presenta las diferentes realidades de dos palestinos, un chico que ha vivido la ocupación toda la vida y una chica que a pesar de haber nacido y crecido en los EEUU decide volver a Palestina.
Debemos tener en cuenta que hacer una película en las condiciones en que se vive en Palestina es casi un milagro.
Desde Israel también se hacen películas que buscan una visión compartida de la realidad, y sobre todo, quieren abrir una brecha al entendimiento entre los dos pueblos. Películas como Los limoneros (Eran Riklis, 2008), Alata (Michael Mayer, 2012), Zona Libre (Amos Gitai, 2015) o Ajami (Scandar Copti y Yaron Shani, 2009) quieren acercarnos a una realidad compleja con culturas enfrentadas y, a menudo, heridas abiertas. Hay otros que nos acercan más a la realidad israelí más escondida que a menudo desconocemos como My father My lord (David Volach, 2007) que nos expone la realidad de una familia ultra ortodoxa de Jerusalén. También queremos mencionar la fabulosa Vals con Bashir (Ari Folman, 2008) impecable documental de animación que nos deja ver los efectos que en el propio director ha tenido su experiencia al servicio de la ejército israelí, y cómo vive el ambiente bélico que le rodea desde hace tanto tiempo.
Finalmente queremos destacar de manera especial el documental Promises (Carlos Bolado, BZ Goldberg y Justine Shapiro, 2001), un emotivo y sincero trabajo que apuesta por explorar la posibilidad de reconciliación entre las dos comunidades a través de los niños, presentando así un futuro posible en medio de una situación imposible. No os lo perdáis!